En la renovación de la clínica ginecológica Oñate en Alicante, tuvimos la oportunidad de llevar la naturaleza a su recepción. Asumimos el desafío de crear un jardín de planta conservada que abarcara 4.30m² en un espacio donde el blanco impoluto de las paredes dominaba el ambiente.

Este jardín no es solo un elemento decorativo; es una declaración de cómo la naturaleza puede coexistir en armonía dentro de espacios modernos y funcionales, especialmente en áreas donde la instalación de un jardín natural no es viable debido a la falta de acceso a una toma de agua.

El diseño incorporó el logo de la clínica, ejecutado en madera e iluminado de manera estratégica, para que resaltara ante el fondo verde. Esta elección añadió un elemento cálido y acogedor a la recepción. La decisión de situar el jardín en este punto específico fue motivada por el deseo de ofrecer una solución de bajo mantenimiento que revitalizara el espacio sin la necesidad constante de cuidados.